viernes, 22 de julio de 2011

ECONOMIA 10

ECONOMIA 10

El asesor económico del presidente de Nicaragua Bayardo Arce declaro que está de acuerdo con la “privatización” de la cuantiosa ayuda (casi 500 millones de dólares al año) que recibe el presidente de Nicaragua Daniel Ortega de mano del mandatario venezolano Hugo Rafael Chávez Frías de la cual además no se aclaran cuentas frente al parlamento nacional que es dominado por la oposición. Informó que el grandioso hotel de luje Seminole ubicado en la ciudad de Managua fue adquirido por el gobierno de Venezuela para ser posteriormente vendidos a personas multimillonarias como lo es el mexicano Carlos Slim quien se mostro interesado por dicho inmueble.
Es entonces cuando reflexionamos, 500 millones de dólares que bien pudiesen haber sido invertidos en la fabricación de viviendas para los cuantiosos damnificados que aun residen en centros de acopio, es una muestra más de la mal versación de fondos que está siendo efectuada por el régimen actual. ¿Por qué no invertir esa cantidad de dineros en nuestras maltrechas estructuras médicas públicas? Que tanto lo necesita.
Parece ser momento en el gobierno de hacer una autocritica y pensar a donde se quiere llegar por este camino. Inclusive hay quienes afirman que este acto gubernamental es una especie de “negocio redondo” en el cual el gobierno adquiere una propiedad a expensas de las arcas nacionales con la finalidad de revenderla y obtener cierto porcentaje que se sumaría a las riquezas de la nación, pero entre tanto revuelo la propiedad termina siendo adquirida por alguna persona allegada al gobierno a un precio mucho más bajo del original; incluso aquellas personas simpatizantes al oficialismo siguen también en la espera de la obtención de sus dividendos como lo son la gran cantidad de empresas expropiadas que han visto detenida su producción debido a que termina de llegar el dinero prometido.
Es un sinfín de problemas existentes en el país los cuales requieren mayor atención por parte del gobierno que sigue enfrascado en derrochar las riquezas del país para obtener la simpatía (temporal) de algunos mandatarios nacionales. Desde cualquier punto de vista es una actitud bastante inaceptable y son cada día mas las personas que están alzando la voz y abriendo los ojos porque este socialismo está tomando un rumbo indeterminado que pinta de gris el futuro del venezolano. 

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